4 tipos de maquillaje de ojos según forma y color

 

Seguro que a todos nos ha pasado intentar un maquillaje de ojos que hemos visto en un tutorial y no obtener el mismo resultado. ¡Pero si a ella le quedaba genial! ¿Por qué a mí no? La respuesta es sencilla: no todos los tipos de maquillaje de ojos son para todos. Cada uno de nosotros tenemos una forma y un color, y debemos maquillarlos basándonos en eso y no en lo que le quede bien a otros. 

 

Cada persona y sus rasgos faciales difieren de otras. De ahí que aplicar las técnicas de contouring según la forma de tu rostro sea primordial. Lo mismo sucede con los ojos. Si quieres sacarte el máximo partido y verte favorecida, te damos unos trucos para que lo consigas. Lo primero es reconocer la forma de tus ojos, y de ahí comenzaremos a maquillar. Por ejemplo: 

 

Ojos hundidos

 

Cuando el hueso de la ceja se nota más que el propio párpado, puede considerarse que hablamos de ojos hundidos. Estos necesitan iluminación, que conseguiremos aplicando sombras de tonos claros en el hueso y el párpado móvil y bajo las pestañas inferiores. 

 

Un tono un tanto más oscuro será el adecuado para la parte superior, que se irá extendiendo hacia la ceja. Y por último, un tono chocolate, gris o incluso negro sobre las pestañas. De esta manera habremos creado un difuminado de abajo a arriba y, de nuevo, abajo que hará ver nuestros ojos más grandes. Por supuesto, no hay que olvidar la máscara de pestañas, la cual podemos combinar con un poco de iluminador en las puntas. 

 

Ojos juntos

 

Cuando entre los dos ojos hay una distancia inferior a lo que mide uno de ellos, hablamos de ojos juntos. Para crear un efecto visual de separación, usaremos los colores más intensos y fuertes en las partes externas y los más claros en el lagrimal y las zonas internas. 

 

Aplicaremos la sombra clara sobre el párpado y el hueso de la ceja, así como en el lagrimal para aportar luminosidad. El tono medio irá en el pliegue del párpado hacia el exterior y el centro de la ceja. La sombra oscura subirá hacia arriba por la parte externa del pliegue. Un delineador dará la sensación de ojos más grandes si pintas con él desde el iris hasta un poco más allá del final del ojo. Y por supuesto, la máscara de pestañas para terminar. 

 

Ojos separados

 

Y este sería el caso contrario al de los ojos juntos. Es decir, que cuando hay una distancia mayor a la del tamaño de un ojo entre ambos, estamos hablando de ojos separados. Este efecto se puede reducir visualmente aplicando sombras oscuras en la parte interna del ojo. 

 

Los tonos claros irán sobre el hueso de la ceja, de modo que se levante la mirada. El tono intermedio irá desde el lagrimal hacia el exterior del pliegue. Los tonos oscuros se aplicarán desde el final de las pestañas superiores hacia la zona del pliegue del ojo. 

 

En este caso usaremos el delineador, trazando una línea delgada que no sobresalga del ojo. Y, por supuesto, la máscara de pestañas es imprescindible. 

 

Ojos rasgados

 

Quien tenga este tipo de ojos sabrá reconocerlo perfectamente. Suelen ser de una forma muy bonita que acepta prácticamente todos los tipos de maquillaje de ojos. Pero si quieres potenciar aún más su belleza, olvida los tonos de sombra claros y trata de destacar la línea de las pestañas. Una forma perfecta para los ahumados más atrevidos. 

 

Ya tienes todos los consejos necesarios para reconocer la forma de tus ojos y elegir entre los tipos de maquillajes para ojos. Recuerda que en nuestra tienda online tenemos una amplia variedad de productos para tal fin, entre ellos un abanico inmenso de sombras. ¡Echa un vistazo!

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